domingo, 7 de abril de 2013

El Dakar cotidiano (y 2) + curiosidades circulatorias.

Esto va de luz y de color, de vestidos y de coches de colores chillones. La luz es la aliada del color y en este país es incluso mas exagerado. La explosión de colores que se ofrece al visitante es apabullante, en contraste con la Europa del norte, gris, con sus atavíos y medios de transporte en tonos aburridos. El colorido de la calle es sorprendente tanto en personas como en  vehículos. Al senegalés,  coqueto por naturaleza, le gusta vestir con colores llamativos y adornar a sus vehículos con dibujos de expresiones chillonas.

Siempre he afirmado que este país es el paraíso del fotógrafo, pero del fotógrafo colorista. El obtenedor de imágenes en blanco y negro se olvida un poco de su manera de componer fotografías aquí. En cualquier esquina, de sorpresa, en cualquier momento, puedes tener la instantánea perfecta con el abanico de colores adecuado y con la luz exacta. El B/N queda como último recurso... ¿o no?






Las vendedora de mandarinas son muy habituales en las carreteras senegalesas. Allá donde exista un atasco o una pequeña aglomeración de vehículos, se encontraran estas esforzadas vendedoras, que por ofrecer su producto se pasan horas y horas a pie de atasco. Somos de la opinión  que, en realidad,  son los vendedores ruteros los que organizan los embotellamientos para que los vehículos pasen despacio a su lado y poder ofrecer su mercancía, con menos riesgo. 











Continuando con la serie de fotografías en las que plasmamos lo que vamos observando en nuestros viajes por las carreteras de Senegal, en la mayoría de los casos sorprendente desde un punto de vista de un conductor responsable occidental, a continuación pongo otra serie de fotos, redundando en el tema del personal que viaja en el "derrière" de los vehículos de transporte. No consigo acostumbrarme a esto, cada vez que lo veo se me ponen los pelos como escarpias. 


Este va modernuqui , a ligar a la discoteca del pueblo de al lado , con los cuellos de la camisa subidos. A la moda como Travolta.



3 comentarios:

  1. La verdad es que las fotos están llenas de color, el azul del cielo es de verdad azul, los vestidos dan alegria al rostro de quien los lleva, asi como los autobuses al entorno sucio y pobre. Lo has captado muy bien. ¡Eres un artista!

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  2. Por cierto, los polizones automovilísticos se montan y ya está o piden permiso al conductor? No sé por qué lo pregunto porque me imagino la respuesta, pero ... pudiera estar equivocada ...

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    1. Yo creo que el que viaja atrás, lo hace por la patilla, como antiguamente viajaban las clase menos pudientes en los tranvías en Madrid. El que viajaba en el "tope" no pagaba, pero era un riesgo el ir colgado, aunque todo el mundo hacía la vista gorda. Ahora eso es imposible en Españistan. Te pueden coser a denuncias y a multas por el mero hecho de ir agarrado a un autobús de la EMT.

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