Este último sábado hemos estado en la isla de Ngor, al norte de la capital, separada del continente por un estrecho brazo de mar de menos de una milla náutica, que se cruza habitualmente en "pirogues" tripuladas por el personal local, que por un módico precio te trasladan a una de las pequeñas playas que rodean la isla.
La experiencia en un principio es muy buena. La isla es espectacular, cerca del casco urbano, fácil de acceder, es " la isla bonita", tiene aguas claras y transparentes con pocas basura y muchas palmeras. Incluso tiene algún restaurante como "la casa de Italia", que pone a disposición del viajero unas barcas con las que cruzar la estrecha lengua de mar que separa la isla del continente y poder utilizar su playa privada a cambio del servicio de restauración. Tiene tumbonas y sombrillas a buen precio, gente local agradable, personal como Michel, que vive en la isla, que te puede hacer un tatuaje de "henna" por menos de 5000 Francos cfas.
A nosotros, como gente común, la realidad nos dijo todo eso que comento en líneas atrás y además que en época vacacional es la isla de las parejitas, de los adolescentes enamorados, de la muchedumbre, del follón y de las tardes sin siesta, por la ingente cantidad de personas que se desplazan en barcas de línea que cruzan el estrecho por menos de 200 Fcfas. A nosotros, occidentales pudientes, nos costó, en una barca particular, 1000 Fcfas por persona, ida y vuelta (aproximadamente 1'5 €), que nos llevó y nos trajo a voluntad, ya que a eso de la tres y pico de la tarde estábamos muy saturados del volumen de personas que nos acompañaban durante toda nuestra estancia en la playa de Ngor, llagando a resultar un pelín agobiante en algunos momentos.
Aquí debajo os dejo una selección de fotografías que hicimos en nuestra travesía. Espero que os guste y que podáis disfrutar de esta isla y del resto del país como lo estamos haciendo nosotros.
La experiencia en un principio es muy buena. La isla es espectacular, cerca del casco urbano, fácil de acceder, es " la isla bonita", tiene aguas claras y transparentes con pocas basura y muchas palmeras. Incluso tiene algún restaurante como "la casa de Italia", que pone a disposición del viajero unas barcas con las que cruzar la estrecha lengua de mar que separa la isla del continente y poder utilizar su playa privada a cambio del servicio de restauración. Tiene tumbonas y sombrillas a buen precio, gente local agradable, personal como Michel, que vive en la isla, que te puede hacer un tatuaje de "henna" por menos de 5000 Francos cfas.
A nosotros, como gente común, la realidad nos dijo todo eso que comento en líneas atrás y además que en época vacacional es la isla de las parejitas, de los adolescentes enamorados, de la muchedumbre, del follón y de las tardes sin siesta, por la ingente cantidad de personas que se desplazan en barcas de línea que cruzan el estrecho por menos de 200 Fcfas. A nosotros, occidentales pudientes, nos costó, en una barca particular, 1000 Fcfas por persona, ida y vuelta (aproximadamente 1'5 €), que nos llevó y nos trajo a voluntad, ya que a eso de la tres y pico de la tarde estábamos muy saturados del volumen de personas que nos acompañaban durante toda nuestra estancia en la playa de Ngor, llagando a resultar un pelín agobiante en algunos momentos.
Aquí debajo os dejo una selección de fotografías que hicimos en nuestra travesía. Espero que os guste y que podáis disfrutar de esta isla y del resto del país como lo estamos haciendo nosotros.
No me olvido de los surferos. Aquí va el enlace molón para ellos:
http://www.gosurf.dk/index.ph
Espero que os gusten las fotografías.
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Y a continuación un vídeo con cánticos regionales.
